La malla metálica expandida se produce mediante un proceso de formación de metal en frío. Con ello se obtienen aberturas y huecos regulares con diferentes formas (romboidales, cuadradas y redondas) y tamaños, permitiendo la transición de aire, líquidos y luz. La malla metálica expandida se puede utilizar para crear dispositivos de filtración o protección para diferentes aplicaciones en los sectores industriales.